No quiero ver, no quiero volver, no he de querer ser parte de esas mezquindades repugnantes. No pregunten qué pasa, no finjan desconocer lo que no he podido disimular. Se hace tarde y yo sólo quiero escuchar y volar, no necesito pensar, no hoy, no hoy con la humillación tan cerca. Me abstraigo del dolor y lo falso
Alto, sublime, donde sólo estoy yo.